Esta tarde me senté en un banquito frente al parque mientras esperaba a una amiga y las hojas verdes balanceándose en un delicioso aire cálido de fines de primavera, anunciando la llegada del verano, me inspiraron para plasmar la imagen que me rodeaba.
Me encanta sacar fotografías y me disculpo por el bajo nivel de resolución, pues utilicé mi celular; obviamente no salí a la calle con la idea de sacar fotos. Anhelo el día en el que pueda tener una cámara profesional, pero mientras tanto, ésto servirá para transmitir el sentimiento enmarcado.
Cuando iba a sacar la tercer fotografía me quedé sin batería, sí, no tuve la mejor de las suertes hoy jajaja, así que en los próximos días estaré regresando al lugar a la misma hora porque me encantó el cuadro con luces irradiando alrededor de las hojas; entonces lo estaré publicando próximamente.
Medialuna de cielo
Aquí hice un acercamiento de los árboles que se encontraban cruzando la calle. Fuertes troncos se visualizan en la vereda en donde yo me encontraba, el central dividiendo la totalidad de la fotografía y curvándose en un semicírculo hacia la izquierda. La frondosa arboleda al fondo me recuerda a un bosque y está iluminada tenuemente por una serie de farolas. El brillo amarillo es mi favorito. Era el momento antes del atardecer, por lo que las luces ya comenzaban a encenderse aunque el cielo aún era de un perfecto celeste. Las hojas recortan el cielo de tal manera que éste parece una adorable medialuna.
Hojas primaverales
Este árbol estaba justo frente a mí y la toma fue realizada desde abajo. Unas pequeñas hojas verdes llenas de vida brotan de las gruesas y abundantes ramas, dejando vislumbrar un claro cielo color celeste, que al toparse con tanta luminosidad parece volverse de reluciente blanco.
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